El bidet, ese sanitario del baño, que lo odias o lo defiendes hasta el final de los días. A pesar de ser uno de los elementos de los que cada vez prescindimos en el baño por falta de espacio, sigue teniendo un público muy fiel que es defensor de este tipo de sanitario, que lo usa cada día y que defiende las virtudes de sus funciones. Su objetivo principal es higienizar después de utilizar el inodoro.
¿Pero, sabemos cómo mantenerlo siempre limpio y bien desinfectado?
Normalmente suele ser de loza o cerámica y su limpieza es muy parecida a la del wc. Son dos elementos que necesitan una limpieza constante y profunda para que su uso sea un lugar saludable y seguro para toda la familia.
¿Qué necesitamos?
- Limpiador de wc
- 1 estropajo
- 2 bayetas de microfibra
- Limpiador antical o vinagre blanco de limpieza
- Lejía u oxígeno activo
Para empezar a limpiar el bidet:
- Humedeceremos la zona con agua tibia
- Usaremos un limpiador de wc, frotaremos por toda la superficie y grifería y dejaremos actuar un rato.
- Pasado el tiempo, unos 5/10 minutos, aclaramos toda la superficie y lo que no alcancemos con el agua con una bayeta de microfibra nueva.
- Si la grifería no nos ha quedado del todo limpia de la cal acumulada, podemos usar un anti-cal o vinagre blanco para eliminar los restos que hayan quedado.
- Una vez limpio, procederemos a la desinfección de nuestro bidet.
- Echaremos un poco de lejía o de oxígeno activo por toda la superficie. Frotaremos bien la zona y dejaremos actuar.
- Una vez pasado el tiempo, retiraremos con abundante agua y ayuda de otra bayeta de microfibra limpiar.
- Cuando el bidet esté totalmente aclarado, lo secaremos con otra bayeta limpia y seca.