Después de un día intenso, no hay nada mejor que meterse en la bañera y darse un buen baño caliente. Para los amantes del baño reparador, las sales aromáticas, las velas y una música relajante, ese momento se convierte en uno de los mayores placeres de la vida. Pero para disfrutar de todo eso, lo ideal es disponer de una bañera limpia, sin cal ni suciedad.
Aunque lo ideal es hacer un repaso a la bañera después de cada uso, lo cierto es que la mayoría de gente no dispone de ese tiempo, lo que implica que la suciedad se va acumulando. Pero no te preocupes, basta con muy poco para que el resultado sea perfecto.
Lo primero que conviene saber, es diferenciar el tipo de mancha que vamos a quitar, ya que cada cual tiene su truco.
Cómo quitar el óxido de la bañera
Se recomienda mezclar un poco de sal con el zumo de un limón y poner la mezcla resultante sobre la superficie de las manchas de óxido, dejando actuar 5 minutos. Después, frotamos con suavidad y lo retiramos. Como la mezcla es un poco abrasiva, utiliza siempre guantes.
Manchas oscuras, a raya
Hacemos una pasta mezclando la misma cantidad de bicarbonato de sodio que de peróxido de carbono, luego la aplicamos sobre las manchas más difíciles y dejamos actuar, al menos, 30 minutos. Después lo retiramos con un paño y frotamos hasta que la mancha desaparezca.
¿Cómo puedo eliminar el moho?
El moho suele aparecer en bañeras que no se han usado durante un tiempo. Nos puede pasar con la casa del pueblo o la de verano, por ejemplo. Lo primero que debemos hacer es aplicar un tratamiento antihongos sobre toda la bañera y luego intentar que no vuelva a aparecer rociando el producto de vez en cuando.
Tratamiento antical
Aunque es complicado quitar manchas de cal, no es imposible. Te damos algunos consejos caseros:
- Limón: aplícalo sobre las manchas de cal y frota con un algodón. Verás como poco a poco la macha desaparece.
- Vinagre: es un potente antical y lo puedes usar directamente sobre la mancha o diluyéndolo con agua a partes iguales. Al igual que con el limón, solo aplícalo sobre la mancha y frota. Para hacerlo más efectivo, puedes añadir a la mezcla de agua y sal, un poco de bicarbonato y lejía, pero cuidado, son productos muy abrasivos. También puedes sustituir la lejía por amoniaco.
Blanquea tu bañera
Una vez tenemos la bañera limpia, es importante recuperar el color y el brillo del principio. Para ello, existen varios trucos:
- Sal y vinagre: pon un vaso con vinagre y añádele dos cucharadas de sal, remueve y deja reposar. Al dia siguiente, pulveriza la bañera con la mezcla y limpia con un paño suavemente. Quedará reluciente.
- Vinagre y agua caliente: pulveriza toda la bañera con vinagre blanco y dejar actuar al menos una hora. Después, coloca el tapón de la bañera y deja correr el agua caliente (mientras sale, dispón de un cubo donde echar el agua fría). Cubre bien toda la bañera con agua caliente y déjala llena toda la noche. Al día siguiente vacía la bañera y frota bien con una esponja. Luego sécalo bien todo con un paño limpio y verás qué como tu bañera luce impecable.
Por supuesto, también existen productos desinfectantes y que facilitan la eliminación de cal, la suciedad y aportan brillo. No dudes en usarlos para la suciedad más incrustada y un acabo perfecto.