A simple vista, una plancha de vapor puede parecer que siempre está limpia, pero ¿mantienes limpia tu plancha por dentro? Es de vital importancia llevar un mantenimiento periódico de la cal que se acumula en su interior para evitar dañar nuestras prendas o que la plancha se estropee mucho antes.
Cómo quitar la cal de la plancha
Cuando usamos agua potable para rellenar el depósito de la plancha, lo más probable es que se llene de cal. Se recomienda siempre usar agua destilada, pero si ya es tarde para eso, basta con frotar la base con un estropajo de níquel y un poco de detergente. Esto eliminará todas las manchas.
Y para limpiarla por dentro, desconecta la plancha y añade una mezcla de agua y vinagre a partes iguales dentro del depósito. Luego, enciéndela de nuevo y deja que se caliente para, a continuación, purgar toda la suciedad haciendo salir el vapor por sus orificios. Luego, limpia con un paño y listo.
Trucos caseros para una limpieza de 10
Además de la cal, la plancha también puede ensuciarse por el polvo o las quemaduras. A continuación, os ofrecemos unos consejos que os ayudarán a tener la plancha siempre como el primer día.
- Plancha obstruida: utiliza velas para taponar los orificios de la plancha cuando esta está caliente. A continuación, aprieta el botón de salida de vapor para destapar los agujeros. El vacío que crea en su interior, antes de expulsar la cera, ayuda a eliminar las obstrucciones, que salen disparadas con el vapor.
- Quemaduras en la base: para eliminar las quemaduras, basta con poner un poco de sal en un paño y, con la plancha caliente, ir moviendo de adelante hacia atrás por encima de la sal hasta que desaparezcan las manchas. Luego limpiamos con un paño húmedo y listo.
- También podemos limpiar la base aplicando sobre ella un poco de pasta de dientes y luego calentándola y limpiándola con un trapo. La base quedará impecable.
