Camino al gimnasio, en el colegio, para ir a trabajar a la oficina…
Las mochilas suelen ser una compañía diaria y práctica para llevar todo lo necesario para una jornada fuera de casa pero con el uso inevitablemente acumulan suciedad, manchas y olores. Te contamos paso a paso cómo limpiar tu mochila y mantenerla en óptimas condiciones.
Materiales necesarios
- Jabón suave o detergente para ropa
- Cepillo de cerdas suaves
- Esponja
- Trapo limpio
- Toalla
- Agua tibia
- Bicarbonato de sodio (opcional)
- Vinagre blanco (opcional)
1. Vaciar y preparar la mochila
- Vaciar la mochila: retira todos los objetos, revisando bien los compartimentos pequeños y bolsillos. Sacúdela boca abajo para eliminar migas o pequeñas partículas de polvo y suciedad.
- Desmontar las partes desmontables: si tiene partes movibles como correas, bolsillos extraíbles internos o portabotellas, quítalos para limpiarlos por separado.
2. Limpieza superficial
- Cepillar la suciedad suelta: Usa un cepillo de cerdas suaves para quitar la suciedad y el polvo que se han acumulado en la superficie y en los rincones de la mochila.
- Limpieza de manchas localizadas: Mezcla un poco de jabón suave con agua tibia y usa una esponja o un trapo limpio para limpiar las manchas visibles. Frota suavemente para evitar dañar el material.
3. Lavado a mano
- Llena una bañera o un lavabo grande con agua tibia y añade una pequeña cantidad de detergente suave.
- Sumerge la mochila en el agua jabonosa. Usa un cepillo para frotar suavemente las áreas más sucias. Presta especial atención a las correas y las áreas de mayor contacto.
- Vacía el agua jabonosa y enjuaga la mochila con agua limpia. Asegúrate de eliminar todos los restos de jabón, ya que pueden atraer más suciedad si se dejan en el material.
4.Secado
- Usa una toalla para presionar suavemente la mochila y eliminar el exceso de agua. No retuerzas ni exprimas la mochila para evitar que se deforme.
- Secado al Aire: Cuelga la mochila en un lugar bien ventilado, preferiblemente al aire libre, pero fuera de la luz solar directa para evitar el desgaste del material. Deja que se seque completamente antes de usarla nuevamente.
5. Limpieza de partes movibles
- Lava las correas y los accesorios extraíbles por separado usando la misma solución de jabón suave y agua tibia. Enjuágalos bien y déjalos secar al aire.
- Si tu mochila tiene un marco interno, límpialo con un trapo húmedo y déjalo secar antes de volver a colocarlo.
Consejos extra
Limpia tu mochila regularmente para evitar la acumulación de suciedad y manchas persistentes.
Para combatir los malos olores, espolvorea bicarbonato en el interior de la mochila y déjalo reposar durante unas horas antes de sacudirlo.
Puedes usar protectores de tela o sprays impermeabilizantes para proteger la mochila de daños por agua.