Si hay un electrodoméstico que está en auge desde hace algunos años este es la air fryer. Que junto con el cada vez mayor interés por llevar una alimentación saludable y dejar de ingerir grasas se han convertido en los grandes aliados de nuestras cocinas sin renunciar a ese “efecto crunchy” que tanto nos gusta en nuestra gastronomía.
Pero como todos los electrodomésticos, ¿hacemos un buen mantenimiento del mismo para que siga funcionando en perfectas condiciones?
Pasos para limpiar una freidora de aire
- Primero nos aseguraremos que la freidora está desconectada de cualquier toma de corriente.
- Debemos separar los componentes eléctricos de la freidora antes de empezar a limpiarla.
- Ahora, retiraremos el aceite y los restos de comida del interior de la freidora con la ayuda de un papel de cocina.
- Retiraremos después todas las piezas del interior de la freidora y las dejaremos en el fregadero.
- Después con la ayuda de un trozo de papel de cocina retiramos, de nuevo, los restos de aceite y alimentos que pueda haber en su interior.
- Lavaremos con agua caliente y lavavajillas todas las piezas en el fregadero para quitar los excesos de grasa. Usaremos para ello un estropajo que no raye las superficies. Aún así lo mejor es usar la parte de la esponja para evitar dañar las piezas.
- Si con la primera pasada, hay partes que no se nos han quedado bien, podemos añadir vinagres de vino blanco para acabar de desengrasar y las zonas más estrechas frotarlas con un cepillo de dientes.
- Para el recubrimiento de la Air Fryer lo ideal es que usemos una bayeta de microfibra nueva empapada en agua tibia y jabón neutro y le pasemos varias veces hasta que hayamos retirado todos los restos de suciedad y grasa,
- Antes de volver a montar y encajar las piezas nos aseguraremos que estén todas secas.
Mucho cuidado porque como pasa con muchos trucos de limpieza se hacen virales en las RRSS. Por tanto, hay que tener especial cuidado con este tipo de trucos de como limpiar la freidora de forma rápida introduciendo agua y jabón en el cajetín, porque no lo recomiendan la mayoría de fabricantes en sus manuales, así que debemos consultar siempre las instrucciones de lavado en el manual del fabricante.